Pugnas, vetos y denuncias se ven en la selección de candidatos al Legislativo
Las negociaciones para armar las listas se intensificaron al filo del cumplimiento del plazo para inscribir candidatos ante el TSE. Los trámites se hicieron, en su mayoría, a última hora en medio de movilización de los simpatizantes políticos.
El cierre del plazo para la inscripción de binomios y candidatos a senadores, diputados y representantes supraestatales ante el Tribunal Supremo Electoral (TSE) estuvo marcado por tensiones internas, malestar entre militantes y denuncias de irregularidades dentro de varias alianzas políticas. El registro, que se estima incluirá a más de 4.500 postulantes, dejó al descubierto fracturas y disputas en al menos tres frentes políticos que se habían preparado para este momento desde la fase prelectoral que comenzó en enero.
Disputas y exclusiones en la alianza Unidad. Una de las controversias más notorias se produjo en el bloque de la alianza Unidad, que postula a Samuel Doria Medina. A días del vencimiento del plazo salió a la luz una lista denominada “negra” que excluía a reconocidas figuras políticas cruceñas como Paola Aguirre, Luisa Nayar, Vicente Cuéllar y María René Álvarez. Este hecho generó una ola de críticas y acusaciones dirigidas al gobernador Luis Fernando Camacho y a su entorno, especialmente al asesor Efraín Suárez, a quienes los excluidos señalan como responsables de las decisiones arbitrarias.
“La meritocracia quedó en segundo plano. Valieron más otros intereses”, lamentó la asambleísta Paola Aguirre en declaraciones a EL DEBER, visiblemente molesta por su exclusión. Por su lado y si bien Álvarez ya se había distanciado del bloque camachista, el resto expresó su malestar por el manejo interno de las listas y por lo que consideraron una falta de transparencia en la toma de decisiones.
Horas antes del vencimiento del plazo de la inscripción, el activista Peter Erlwein Beckha, quien había sido postulado como quinto diputado suplente por Santa Cruz del bloque Unidad denunció entre sollozos haber sido excluido por el empresario Samuel Doria Medina. ¿La razón? El haber presentado un recurso constitucional que congeló la candidatura de Andrónico Rodríguez por el Movimiento Tercer Sistema (MTS).
Libre: tensiones por la vicepresidencia y las candidaturas. En la alianza Libre, liderada por Jorge Tuto Quiroga, también surgieron tensiones internas. Según una fuente de esa organización, el principal conflicto giró en torno a la elección del candidato a la Vicepresidencia. Entre los nombres que se barajaban estaban el empresario Branko Marinkovic, el comunicador Gary Áñez y el joven ejecutivo Juan Pablo Velasco. La decisión de Tuto de inclinarse por Velasco desató malestar significativo, debido a que es hijo del exvicepresidente del intervenido Banco Fassil.
“Hay preocupación porque Velasco no tiene trayectoria política ni experiencia para una campaña de esta magnitud, y el hecho de estar vinculado familiarmente a un banco cuestionado generó resistencias internas, aunque él no tenga responsabilidad directa”, dijo la fuente.
Además, se registraron pugnas por la primera senaduría, que fue disputada entre Marinkovic y Áñez. Ambos habían acompañado a Quiroga en su gira nacional, pero finalmente quedaron fuera. Otro punto de fricción fue la presión de sectores vinculados a Demócratas, que intentaron imponer a Kathia Quiroga como primera senadora. “Hay demasiadas injerencias de grupos de poder que no permiten renovar liderazgos”, comentó otro miembro del equipo de Libre.
En la alianza Autonomía Para Bolivia – Súmate, que impulsa la candidatura de Manfred Reyes Villa, también surgieron denuncias. Rodrigo Delgado, delegado político de esa agrupación, denunció públicamente un presunto intento de cobro de $us 30.000 para asegurar candidaturas en las listas legislativas correspondientes al departamento de Tarija.
“El jefe de campaña nacional, Freddy Camacho, y su asistente César Camacho exigieron dos pagos: uno antes del 16 de mayo, con firma de acta de compromiso, y otro tras la inscripción oficial del 19. Esto no tiene nada que ver con principios democráticos, es el uso del poder como si fuera un maletín de negocio”, denunció Delgado, cuestionando la falta de apertura hacia nuevos liderazgos.
En el Movimiento Al Socialismo (MAS), las tensiones aumentaron luego de que el presidente Luis Arce decidiera declinar su postulación. Esta decisión también implicó retirar el respaldo a la diputada Deisy Choque, quien hasta entonces era considerada una de las principales aspirantes a la Vicepresidencia.
La sorpresa fue mayúscula cuando, el sábado 17 de mayo en plaza Murillo, el Pacto de Unidad anunció como binomio oficialista al ministro de Gobierno, Eduardo del Castillo, como candidato a la Presidencia, y a Milán Berna como candidato a la Vicepresidencia. Esta reconfiguración modificó también las listas parlamentarias.
Deisy Choque, quien había recibido el respaldo de las nueve direcciones departamentales del MAS, expresó su desconcierto por haber sido desplazada en el último momento. “Un día antes, ganamos contundentemente en el Pacto de Unidad. Hubo una resolución. Pero la política es así. Otra persona se llevó el trofeo”, declaró, resignada.
Aunque descartó sumarse a la agrupación Morena, Choque aseguró que continuará apoyando al binomio del MAS, pese a su exclusión. “Espero que la decisión que hayan tomado sea para bien y valga la pena”, manifestó.


